EL BELÉN DE LA IGLESIA


El Belén es una representación plástica del nacimiento de Jesucristo, y es tradición su construcción y exhibición en hogares, iglesias o centros públicos en países de tradición católica.

Desde hace muchos años en San Bartolomé de Pinares se viene montando el Nacimiento en la Iglesia, en la actualidad de esta labor se encarga de forma altruista la Familia Martín con Paco a la cabeza. Y son tres generaciones las que trabajan conjuntamente para que este laborioso trabajo se lleve a cabo. Las mujeres ayudan en el tema decorativo y ellos en la infraestructura para que el Belén cobre vida.

Que mejor que nos cuente Javier Martín, hijo de Paco y uno de sus creadores, la historia que hay detrás de él.

Sobre 1958, el cura, D. Casimiro, ya ponía un pequeño Belén (2 x 2,5m.) al lado de la sacristía. Eran solo el Nacimiento y los Reyes, pero con figuras hechas de madera por el mismo.
Después, con D. Jose Mª, en los años 60 se traslado a lado de la torre, se amplió un poco y empezaron a montarlo las catequistas y colaboradoras de la parroquia.
A principios de los 70, se compraron, con la colaboración de todo el pueblo, los Reyes Magos y el Nacimiento que actualmente seguimos poniendo.
A partir de 1980 o 1981, fue cuando mis padres (Paco e Isabel) empezaron a implicarse un poco más y a tomar un poco la iniciativa de montar el Belén. Se empezaron a comprar algunas figuras ya que hasta entonces era “caseras” hechas de espuma.

A principios de los 90 se trasladó a la puerta de atrás de la Iglesia y se amplió considerablemente su tamaño, eso permitió empezar a montar un río, al principio sin que corriera el agua y poco a poco se seguía  comprando alguna que otra figura. El montaje del Belén se vivía de una manera especial en la familia, y los que entonces éramos los peques… ya empezábamos a trastear con el Belén y eso hizo que nos picara el gusanillo

A mediados de los 90 Paco empezó a hacer “inventos” para conseguir figuras en movimiento y así se hicieron el alfarero, el herrero, el panadero, el río empezó a correr, etc… se empezaron a hacer casas nuevas etc…

En 1998 se instaló una estrella móvil que nos dio más de un quebradero de cabeza y que solo se montó durante dos años.

A partir de ese año lo montamos la familia Martín, cada uno con unas tareas pero colaborando todos.

En 1999, Ana y yo hicimos el castillo, intentando imitar la fortaleza de Herodes y la Cúpula de la Roca de la Plaza de las Mezquitas de Jerusalén, que vimos durante la luna de miel, aunque después ha ido sufriendo varias remodelaciones.

  Cúpula de la Roca de la Plaza de las Mezquitas de Jerusalén

A principios del siglo XXI empezamos ya a visitar distintos Belenes y para “copiar ideas” y aprender técnicas nuevas hablando con otros belenistas.

En 2.003 montamos la 1ª lejanía, que nos dio muchos quebraderos de cabeza… pero al final lo conseguimos.

En 2006, aprovechamos la “excusa” de que se barnizó todo el suelo de la Iglesia para cambiar la ubicación del Belén. Lo trasladamos a la parte de atrás y eso nos permitió descubrir el precioso artesonado del techo, hasta entonces oculto por que esa zona no tenia iluminación y se utilizaba como almacén.
Además pudimos ampliar el tamaño del Nacimiento considerablemente, cosa que ya teníamos prohibida en su anterior ubicación. También pudimos poner “noche y día” en la iluminación, lo cual antes era imposible y sobre todo tener mas tiempo para ir probando cosas nuevas ya que no teníamos la obligación de desmontarlo todo después de la Navidad.

En 2008 instalamos la 1ª cascada y en 2010 conseguimos que lloviera en el Belén….

Ahora empiezan los nietos de los “promotores” del Belén a trastear y a aportar su granito de arena… la saga continúa.

 

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Es mucho el tiempo que los Paco dedica hasta poner a punto la escena, primero en casa preparando los “inventos” y luego en los meses previos a la Navidad en la Iglesia montándolos hasta quedar perfecto.

Parte de la financiación para que se lleve a cabo se consigue gracias al dinero conseguido de los donativos de “la hucha” que se encuentra en él y del resto se encarga la propia familia Martín.

En el Nacimiento encontramos escenas de distintos oficios  en los que Paco ha intentado reflejar cómo eran esos trabajos antiguamente en nuestro pueblo. Además son varias las referencias a San Bartolomé de Pinares, ya que está incluido en él El Puente de los Tres Ojos o la Fuente de Cascorro.

La escena principal es el Portal en donde se representa el nacimiento de Jesús y está situada en el centro, y alrededor se sitúan otras como la Anunciación, la Búsqueda de la posada, la Anunciación a los pastores entre otras.

Los materiales usados son bastante variados, excepto las figuras, que se compran y de las que Paco se encarga de darlas movimiento, el resto se construye con materiales naturales como la madera o musgo y de elementos reciclados como pueden ser ruedas de bicicleta, motores de microondas y lavadoras. Cualquier cosa puede ser utilizada y cuando pasa por las manos artesanales de Paco transformada. Una simple caja de bombones, puede llegar a ser la Estrella que guía a los Reyes Magos y logra que aparezca recorriendo toda la escenografía.

Bajo el Nacimiento se encuentra un mundo de motores, enchufes y bombas gracias a los cuales se consiguen distintos efectos como el movimiento de muchas de las figuras o que corra el agua por el río y los pilares, incluso lograr lluvia de unas esponjosas  nubes o lograr un cambio de sensaciones lumínicas diferenciando el día de la noche en él. Además se consiguen  perfectos trampantojos en “las lejanías” , creando largas perspectivas más allá aún del límite que marca la escena. En fin, son innumerables los detalles que podemos encontrar.

Cada año se van introduciendo nuevas técnicas y son varias las ideas que se introducirán en los próximos.

Tras tener la oportunidad de ver el Belén con la familia Martín y ver todo el trabajo que se encuentra tras él, lo que más me llamó la atención fue comprobar  la ilusión con la que lo realizan y cuentan cada uno de ellos cada detalle, hasta los más pequeños me contaron como han ayudado a elaborarlo. Es un gusto ver como   disfruta la familia Martín trabajando juntos haciendo el Belén de la Iglesia de San Bartolomé de Pinares.

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